El base idóneo en un lugar preparado para triunfar. Una pequeña localidad, Zgorzelec, cerca de la frontera con la República Checa. En ella, tres puntales llevan a un equipo humilde de baloncesto al estrellato, colandose en la primera edición de la Final Eight de Turín.Tres puntales, tres estrellas: Thomas Kelati, al que vimos esta temporada en Unicaja, yq ue hacía las veces de alero. David Logan, al que hemos visto ejercer de polaco en el Eurobasket, y Andrés Rodríguez, un base de apariencia frágil pero de desparpajo y de saber jugar la pelota en cada una de las exigencias del equipo.
Más o menos hemos visto competir al alto nivel a los dos primeros. Ahora es el turno de la tercera de aquellas estrellas, del puertorriqueño, del base, que llega al Baskonia en otra de esas maniobras en las que demuestra ser un equipo preparado en lo deportivo hasta el más mínimo detalle. Tres semanas de lesión se han sustituido por un jugador a prueba.
Si con un poco de suerte llega a la Supercopa y tiene unos pocos minutos, puede ser un bonito escaparate para mostrarse en la cristalera de la ACB, y de reclamar lo que aquella temporada en el Turow pareció más que nunca, su capacidad para poder dirigir un equipo con mayores aspiraciones.
28 años, es su momento para ganarse un sitio.
1 comentario:
Joven promesa por lo que parece sí...
Veremos pero base y Baskonia no es sinónimo de algo más allá...
Veremos como va el Año I tras Pablo pero viendo la ristra de estos años: Ukic, Planinic, Lucas, Shakur, etc...
Publicar un comentario